
encontrando mi profeta
en el mapa inmenso de la mirada de Dios
Duele el esternón, sudan las ilusiones.
presienten mis células, el tiempo,
de la lluvia, la tuya y mía.
esa de charcos hondos y profundos,
de millones de arco iris.
Bostezo lágrimas de extrañarte.
Pensándote tumbado.
Sólo sobre el césped.
Cansado.
Brazos como arañas , que llegan,
para hacerte montañas de cosquillas.
Locuras de atardecer.
puede ser ...yerba mate tomada
muy despacio.