Existe sólo una medicina, porque solamente hay una enfermedad: la falta del descubrimiento de sí mismo.
Cualquier cosa que me digan de mí, sólo se refiere a un comportamiento en un momento determinado. No se refiere a lo que yo Soy.
Lo que yo Soy, lo soy por mí mismo; cómo soy, lo soy en comparación a otros.
Debo ver quién Soy yo, sin tinglado mental.
Yo soy el sujeto de toda experiencia. Ya somos la Realidad, pues no podemos ser otra cosa.
Tú ya eres la Realidad que eres. Tú ya estás realizado. El problema está en que no te lo crees, pues tú crees ser algo o alguien: Margarita, José, etc.
Una clave importante: no vivamos el cómo soy; busquemos qué soy; y después, quién soy.
Es un doble trabajo: ver lo que no eres y vivir lo que sí eres. Sin forzar, sin exigencia. La exigencia debe estar en Ser, no en intentar cambiar los modos. Cada momento estará asociado a su modo.
En la medida que descubro lo que Soy, veo también lo que no soy. Entonces adquiero poder sobre esto que no soy (el "personaje" o una serie de ellos).
No es correcto decir "yo tengo inteligencia" o "yo tengo voluntad"; lo correcto es "la Inteligencia que funciona a través mío" o "la Voluntad que funciona a través de mí".
Yo no soy esta unidad particular que llamo "yo", sino que Es la Vida la que se vive a través mío. Debo desconectarme del circuito mental pequeño para Ser la Vida Infinita que vive en mí.
Mientras vivas en lo que sientes, mal. Vive en lo que Eres detrás de lo que sientes.
Siempre he sido Eso. Pero es necesaria una investigación activa para reconocer Eso que soy.
Frases extraídas de "Palabras de un Maestro. Blay en síntesis" de M. Martí